Colorado retira el retrato del que Trump se quejó por aparecer “distorsionado” | Internacional

Colorado retira el retrato del que Trump se quejó por aparecer “distorsionado” | Internacional


Donald Trump ya tiene una cosa menos de la que quejarse. El presidente de Estados Unidos puso el domingo el grito en el cielo por lo mal que salía en un retrato de 2019 que lleva más de cinco años colgado en el Capitolio estatal de Colorado, en Denver. Tras culpar sin sentido ni fundamento al gobernador demócrata por el cuadro, que en realidad fue encargado y pagado por sus compañeros del Partido Republicano en el legislativo estatal, Trump dijo que prefería no tener retrato que ese en el que se veía “distorsionado”. Dicho y hecho. Los republicanos han pedido que se cumpla la voluntad del presidente y los demócratas, que controlan el parlamento estatal, no han puesto obstáculos.

“Los líderes republicanos pidieron que se retirara”, dijo el portavoz demócrata de la Cámara de Representantes de Colorado, Jarrett Freedman, en un comunicado. Freedman añadió que la presidenta de la Cámara de Representantes, Julie McCluskie, y la líder del grupo demócrata, Monica Duran, “se centran en mantener la seguridad de los habitantes de Colorado y en reducir costes, no en colgar retratos”. “Si el Partido Republicano quiere dedicar tiempo y dinero a qué retrato de Trump cuelga en el Capitolio, entonces es cosa suya”, concluyó.

Trump se quejó amargamente de su retrato el domingo, sin que quede claro qué es lo que le motivó a hacerlo más de cinco años después de que se pintase y se expusiese. Parecía molestarle especialmente salir peor que su primer antecesor, Barack Obama. “A nadie le gusta una mala foto o pintura de sí mismo, pero la del gobernador de Colorado, en el Capitolio del Estado, junto con todas las de los demás presidentes, fue distorsionada a propósito hasta un nivel que tal vez ni yo haya visto nunca. La artista también hizo la del presidente Obama, y él está estupendo, pero la mía es realmente la peor. Debe de haber perdido su talento con la edad”, escribió Donald Trump en Truth, su red social.

El presidente culpaba sin ningún fundamento de la pintura al gobernador de Colorado, Jared Polis. “En cualquier caso, preferiría no tener un retrato que tener este, pero mucha gente de Colorado ha llamado y escrito para quejarse. De hecho, ¡están enfadados por ello! Estoy hablando en su nombre con el gobernador de la izquierda radical, Jared Polis, (…) para que la retire. ¡Jared debería avergonzarse de sí mismo!”, añadió el presidente.

El retrato, en realidad, fue financiado tras una colecta para captar 10.000 dólares puesta en marcha en GoFundMe por el republicano Kevin Grantham, por entonces presidente del Senado estatal. Fue presentado en 2019. Es una pintura al óleo de la artista local Sarah Boardman que está colgado en la Galería de Presidentes, en la rotonda del edificio. Boardman pintó también retratos de George W. Bush y Barack Obama, según figura en su página web.

“Tanto si este retrato le hace sonreír como si le hace fruncir el ceño, recuerde que tiene derecho a hacerlo porque esto es Estados Unidos”, dijo el republicano Grantham el día de la ceremonia de presentación del cuadro en el Capitolio, según recoge una información de aquel día del Denver Post. Ya por entonces

La oficina del gobernador prefirió tomarse la polémica con cierto sentido del humor. “El gobernador Polis se sorprendió al saber que el presidente de los Estados Unidos es un aficionado a nuestro Capitolio del Estado de Colorado y a sus obras de arte”, dijo una portavoz en un comunicado remitido a medios locales. “El Capitolio del Estado se terminó de construir en 1901 y está decorado con ónix rosa y mármol blanco de Yule extraídos en Colorado, e incluye retratos de expresidentes y exgobernadores. Agradecemos al presidente y a todos el interés mostrado en nuestro edificio del capitolio y siempre estamos buscando cualquier oportunidad para mejorar la experiencia de nuestros visitantes”.