Juan Carlos I presenta una demanda contra Corinna Larsen por delitos contra el honor | España

Juan Carlos I presenta una demanda contra Corinna Larsen por delitos contra el honor | España


Juan Carlos I ha presentado una demanda por supuestos delitos contra el honor contra su expareja Corinna Larsen y el exabogado de esta última, el letrado ginebrino Dante Canonica en un juzgado suizo, según ha confesado el rey emérito a personas de su confianza y ha confirmado EL PAÍS. Canonica fue, además, el director de la fundación panameña Lucum en la que el ex jefe de Estado ocultó 65 millones de euros recibidos de Arabia Saudí.

El rey emérito no ha atendido a personas de su confianza que durante los últimos años le desaconsejaron emprender acciones judiciales contra la consultora alemana después de que esta perdiera en los tribunales de Londres una demanda por acoso y espionaje que finalmente fue archivada. Por el contrario, testigos presenciales de esas conversaciones afirman que tras esa victoria judicial algunos de los letrados británicos de los tres despachos que le defendieron en ese litigio le animaron a demandar a Larsen por las acusaciones que esta esgrimió contra él. “Entonces le convencimos de que no lo hiciera, pero ahora, mal aconsejado, ha cambiado de opinión”, señala una de las personas a las que ha comunicado su iniciativa.

La demanda contra Larsen, adelantada por El Periódico, coincide en el tiempo con otra presentada por Juan Carlos I en España contra el expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla por las declaraciones de este en distintos medios de comunicación. En este caso, por supuestos delitos de difamación y protección de su derecho al honor. Y con del anuncio de unas memorias del ex jefe de Estado que previsiblemente se publicaran el próximo verano.

Un tribunal de Londres archivó en 2023 la demanda presentada de la empresaria alemana contra el rey emérito porque consideró que la jurisdicción del Reino Unido no es la adecuada para juzgar el caso, y porque el relato de la demanda de Larsen no constituye una figura delictiva de acoso (harassment, en inglés), según la legislación británica.

Durante ese litigio salieron a la luz detalles de la soterrada batalla que durante años mantuvieron Juan Carlos I y Larsen después de que esta se negara a devolverle los 65 millones de euros (100 millones de dólares al cambio de la época) que el rey emérito le donó de forma “irrevocable” en 2012 a su entonces pareja. Una donación revelada el 3 de marzo de 2020 por este diario y que el ex jefe de Estado entregó a su amiga cuando el banco suizo Mirabaud & Cie le pidió que cerrara su cuenta secreta tras estallar el escándalo de la cacería de elefantes en Botsuana.

El dinero lo había recibido el rey emérito en agosto de 2008 a través de una transferencia del Ministerio de Finanzas de Arabia Saudí. Una investigación del fiscal suizo Yves Bertossa no logró acreditar que se tratara del pago de una comisión por el contrato que un grupo de empresas españolas para construir el AVE a la Meca. Larsen oculto los 65 millones en una de sus cuentas off shore en la filial en (Bahamas) del banco Gonet & Cie y en una entidad bancaria en Nueva York y se negó a devolver el dinero.

La inclusión en la demanda del abogado ginebrino Dante Canonica ha sorprendido porque se trata de la persona que dirigió la sociedad panameña Lucum, a cuyo nombre se depositaron en el banco suizo los 65 millones que no se declararon a la Hacienda española. Todavía sigue siendo un misterio la causa por la que rey Abdalá Bin Abdelaziz entregó este “gift” (”regalo”, tal y como aparece en la anotación del ingreso el dinero en el banco por parte del gestor de la cuenta) a Juan Carlos I. Canonica era, a su vez, abogado de Larsen, aunque su relación se enfrió cuando la alemana se negó a devolver los 65 millones. En sus declaraciones ante el fiscal suizo que imputó a ambos por blanqueo de capitales, este letrado aportó detalles sobre el rey emérito, sus viajes al palacio de La Zarzuela en Madrid y el manejo del dinero. Detalles y revelaciones que ahora se cuestionan. La causa suiza fue finalmente archivada.

Este diario ha intentado recavar la visión de Corinna Larsen, sin obtener respuesta.