“El Gobierno perdió totalmente la autonomía sobre la política cambiaria”, indicó un economista

“El Gobierno perdió totalmente la autonomía sobre la política cambiaria”, indicó un economista

El economista, Santiago Fraschina, analizó para este medio la reciente salida del cepo cambiario implementada por el gobierno de Javier Milei y sus posibles consecuencias económicas. En otra instancia, destacó que esta medida fue una imposición del Fondo Monetario Internacional más que una decisión autónoma del Gobierno.

La urgencia del Gobierno por presentar el nuevo esquema cambiario

No es que el Gobierno quiso tomar esta medida, porque si no, lo hubiera hecho antes”, sostuvo Santiago Fraschina. Y agregó: “Llegaron a una situación límite por el cambio en el clima internacional, la salida de dólares y la pérdida de reservas del Banco Central”.

Asimismo, explicó que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional exigió cambios en el régimen cambiario, lo cual derivó en una devaluación, aunque el Ejecutivo lo presente como una “flotación con bandas”.

Preocupación por el último dato de inflación

“Esto implica una devaluación de la moneda nacional y va a tener un impacto inflacionario”, advirtió Fraschina. De hecho, citó el último dato de inflación, que fue del 3,7% general y 5,9% en alimentos, como una señal preocupante.

Por otro lado, pronosticó que el tipo de cambio oficial se moverá hacia los $1.400, la banda superior establecida por el Gobierno, y que eso impactará en los precios. “Quienes fijan precios, lo harán pensando en ese dólar, no en los $1.200 actuales”, señaló.

La política cambiaria de Argentina quedó en manos del FMI

Sobre los primeros movimientos del dólar, que bajó del pico de 1.250 a $1.190, el economista expresó: “Subir un 8% en un día es una devaluación, y ese aumento se va a trasladar a precios, tarde o temprano”.

Además, advirtió que las bandas cambiarias serán “flexibles”, y que el FMI volverá a revisar el acuerdo cada tres meses, lo que podría derivar en nuevas exigencias. “El Gobierno perdió totalmente la autonomía sobre la política cambiaria. Ahora la maneja el FMI con un solo objetivo y es acumular reservas del Banco Central”.

Críticas al superávit fiscal por su poca estabilidad en el marco económico

Respecto a los primeros meses de gestión de Javier Milei, el entrevistado comentó: “El Gobierno llegó con una desesperación total al FMI, lo que demuestra el fracaso de su primera etapa”.

Según explicó, el Ejecutivo hizo foco únicamente en lograr superávit fiscal en pesos. “Lo consiguieron, pero si eso fuera suficiente, ¿por qué llegaron en abril con urgencia a pedirle dólares al FMI?”, se preguntó.