Todavía falta bastante, en tiempo y en vivencias, para que se cumplan los dos primeros años de la experiencia de Edinson Cavani en Boca. Cuatro meses, en realidad, pero que en el mundo Boca se multiplican por la intensidad con la que se vive cada momento. Particularmente en este caso, el Matador se enfrenta a la chance de ganar por primera vez un título con la azul y oro y a jugar un Mundial de Clubes que lo tiene como símbolo del último club de su carrera. Y como líder del grupo y cara visible, su palabra siempre es importante.
“Es un buen momento, sí. Más allá de algún tropezón que hayamos tenido hemos mostrado un poco más de solidez, como grupo. Esas son buenas señales. Después hay que ver cómo se toman las señales, porque a veces los malos momentos son solamente un partido. No toda derrota o tropezón son malos momentos, a veces son partidos. Desde toda mi experiencia en Boca, este es un buen momento“, arrancó analizando el uruguayo en charla con Radio Continental.
“No es fácil lograr madurez como equipo, más en un club como Boca. Acá el hincha quiere ganar títulos, como nosotros. Es normal que nos exija. En esta etapa hemos ido recuperando jugadores y encontrando poco a poco la identidad, que es lo que más se busca y necesita. Este es un club grande y siempre hay recambio porque hay figuras que se venden o se tienen que ir por diferentes motivos, jóvenes que salen… no es fácil encontrar la regularidad”, continuó explicando, con mucha paciencia para dar su visión.
La cuestión del Boca visitante (muy distinto en rendimiento del que juega de local), surge como tema. Y ahí Edi tiene también una mirada particular: “Ya hace unos cuantos partidos, más allá del tropezón con Newell’s, el equipo va logrando de a poquito ser más sólido afuera. Lo más importante es que encontremos cada vez más esa identidad como equipo y club. A veces al jugador le cuesta adaptarse a dónde está y lleva tiempo. Dimos una buena muestra de caracter y madurez en el partido pasado. Pero eso ya pasó”.
Enseguida la charla deriva en su marca registrada, el gol. El mismo tema que mantiene en vilo a todos los hinchas porque se le viene negando en estos meses. “Uno tiene un camino recorrido y demás y siempre el afán de uno es el de hacer goles porque siente que así aporta al equipo. Uno se siente con la necesidad y soy el primero que tiene ganas. Me pueden decir mil cosas, pero son momentos. Y es una cuestión de energía. A veces uno tiene que bancar esos momentos. La única forma es tener calma”.
Su presente en Boca, las decisiones en el área y sus compañeros

Claro, con Boca recomponiéndose de la eliminación de la Copa Libertadores pero en un camino ganador que lo tiene en la punta del Torneo Apertura, para el delantero es importante destacar cómo vive el día a día en el equipo al que llegó en agosto de 2023. “Hoy me siento feliz, contento, más allá de no tener gol. Estoy en un lugar espectacular. El día que yo no este más contento, con todo el dolor del mundo seré claro y le diré a Román y a la gente lo que sea y daré un paso al costado. Siento felicidad cuando ganamos y que el equipo se acerque a los objetivos”, reconoce.
Y enseguida, va un poco más allá: “Si los goles no llegan ya van a llegar. Si en algún momento me toca esperar porque hay un compañero mejor, estoy dispuesto a esperar para aportar lo mejor”.
Delantero de raza, no duda en ponerse didáctico para explicar movimientos y jugadas. Y una de ellas es la que en el último partido significó un gol perdido, una jugada puntual en la que parecía tener remate pero eligió dar un pase. “La opción de no definir es porque uno quiere asegurar”. Y el paso siguiente es contar cómo le sientan sus diferentes compañeros de ataque.
“No se si cambia que juegue Merentiel o Milton conmigo, pero creo que los equipos tienen que tener una identidad. Todo aquello que se trate por un objetivo en conjunto tiene que tener un equipo. Creo que el futbolista, teniendo las características que tenga, se puede adaptar. Con una idea clara todos tiramos para el mismo lado y la esencia va a ser la misma. Claro que son diferentes entre sí, pero lo que tiene que siempre prevalecer es saber a lo que se juega y conocer al compañero”.
Sobre el clásico que se viene
“El clásico es una cuestión de madurez de los equipos. Sabemos que el clásico está cerca pero que es importante ganar el partido que viene. Nos enfocamos en este partido para llegar al clásico con la mejor preparación física, mental y táctica. Un clásico es un clásico llegues ganando o perdiendo. Salís a la cancha a dar la vida, pero no es lo mismo llegar con confianza a llegar con dudas o con desconfianza. Es muy importante lo que pase este fin de semana. Después puede pasar cualquier cosa”.
Su lesión en la espalda

“De la lesión en la espalda vamos mejor. Ya estamos casi. Hoy me puse a hacer unas piruetas con mi hija y me acordé que ya no puedo ciertas cosas y que me tengo que cuidar un poquito, pero gracias a Dios vamos bien”.
La identidad del Boca de Gago
“Siento que este Boca tiene identidad y la va generando. No es en cuestión de un mes o cinco partidos, sino de un camino que se va creando. Se va conociendo cada vez más al entrenador y a los compañeros que llegan. Yo creo que si, ha generado este Boca una identidad. Lo vamos demostrando y queremos seguir por ese camino. El equipo está comprometido. Los chicos se dan cuenta que hay que estar metido a full. Hay algo que se está creando pero se puede romper si uno no lo cuida. Se tiene esa identidad, hay que plasmarla”.
El trabajo de un delantero
“Dentro de un partido hay muchas situaciones que no se ven. Muchas veces se ven los resultados finales. Esa es la contra del delantero porque nuestro trabajo es aportar goles y si no se hace gol se opina de una forma. Siempre en mi carrera he disfrutado el fútbol. Mi padre me ha pedido que no corra tanto, pero yo toda mi carrera fui igual, no lo puedo cambiar. El día que no pueda hacerlo no jugaré más“.
Lo que digan los de afuera

“Yo quiero que gane el equipo y, si además puedo hacer goles, chocho de la vida. Soy el primero que quiere hacer goles, pero si el equipo funciona me gusta jugar así a la pelota. Que opinen, que digan lo que quieran. Lo que me importa es lo que sientan mis compañeros. Si vivimos de lo que opinamos al final siempre estamos en la cresta de la ola o somos los peores del mundo. La crítica es fácil de la boca para afuera, pero uno tiene que estar convencido de lo que lo hace feliz y dar lo mejor de uno”.
La recuperación de Marcos Rojo
“Si estas en un equipo y ves que por ahí las cosas no te salen o tenes un problema y no te sentís al tope es normal que con el tiempo te sientas mal y triste. Te sentís frustrado y seguramente Marcos (Rojo) estaba pasando por un momento difícil. Le puso unos huevos bárbaros. Se puso a laburar a full y a querer mejorar, eso es lo que uno rescata y admira. Hoy disfruta, pero no porque hizo el gol el fin de semana, sino porque ve el camino que hizo y que le está dando frutos. Me alegra”.
Profesional a los 38 años
“Nosotros sabemos que no es lo mismo enfrentar una lesión cuando tenes 20 que cuando tenes 35. El nivel de recuperación es un poquito más lento, los ritmos son diferentes, el cuerpo te responde diferente. Es normal que a Ander (Herrera) le pase eso. Sabemos que nos queda poquito tiempo, entonces estar afuera de la cancha te cuesta y te frustra. Para eso están los grupos, para apoyar. Creo que Ander está bien protegido con nosotros, que lo vamos a acompañar”.
“Podemos competir en el Mundial”
“Está claro que en el fútbol europeo hay otro potencial económico por muchos factores, pero el fútbol está hoy mucho más igualado por toda la parte táctica, por toda la parte de información que se puede tener para atacar un punto flojo o aprovechar un jugador. ¿Cuántos partidos hay hoy que terminen 4 a 0 o 4 a 1? ¿Cuántas finales hay que terminen así? Hasta te diría que en Europa se trabaja menos físicamente. El fútbol europeo mueve marketing y tiene otro potencial económico que permite mostrar otras cosas, pero últimamente el fútbol está siendo cada vez más igualado”.
El predio
“Boca tiene un predio 10 veces mejor que el del Valencia. Boca tiene un predio que lo tiene todo. También pasa por otro lado. Vos podes tener un grandísimo predio con la última tecnología, pero si no tenes muchachos con ganas de trabajar es inútil tener un montón de cosas. Boca tiene un grandísimo predio para sacar futbolistas y tener todas las herramientas para trabajar. Además, una gran calidad humana. Yo voy feliz a entrenar. Tenés todo en Boca”.
El gol anulado contra Barracas y la actitud de Echenique de mandarlo a leer el reglamento
“Claro que si un árbitro te la anula va a tratar de darte motivos y vos vas a tratar como deportista de darle los tuyos. Es una lástima porque fue un lindo gol, no fue un gesto como para anularlo. Después ves otro partido y lo ven natural y a vos te toca que te lo anulen. Es incómodo, te frustra. ¿Los árbitros no leen el reglamento de la misma manera? Si vos me decís que salté con un codo, o algo alevoso. Pero estás jugando en una baldosa. Con las herramientas que tenemos a veces digo, dejala seguir, y anda al VAR. Te da tristeza, te frustra, pero puede haber interpretado que fue falta. Ya pasó“.
Sobre Gago como DT
“Yo creo que Fernando (Gago) desde que entró al club y demás ha tratado de ser cercano con el futbolista. Seguramente a veces equivocándose, como todos nosotros. Creo que ha mantenido siempre una postura para con el grupo en charlas que hemos tenido. No se le iba a soltar la mano, como no se le hace a ningún entrenador, estés contento o no. Tiene que haber una responsabilidad primaria, que es el respeto al club. Eso no se mancha. Acá fue en conjunto. Fernando bancó lo que tuvo que bancar, la verdad fue un momento difícil con críticas y todo. Fue un conjunto de cosas. El equipo demostró que hay que seguir luchando. Acá no es que los jugadores bancaron a Fernando. Si algún día me entero que un compañero intenta voltear a un entrenador primero me voltean a mí. Yo tener un compañero así no quiero, seré el primero en plantarme a hablar”.
La perla del Beto Márcico
“Después de tu experiencia en Francia, ¿te quedás con el vino o con el champagne?”, le preguntó el Beto Márcico desde su lugar en la mesa del programa. “Con el tiempo le empecé a agarrar el gustito al vino, metiéndome en ese mundo”, contestó Edi, antes de explayarse sobre la importancia de mantener a los jóvenes ajenos a la influencia que puedan tener las críticas, en pos de que no perjudiquen su tránsito en el fútbol, o en cualquier ámbito en el cual estén sujetos a opiniones. Porque el uruguayo, ante todo para este Boca y para el fútbol argentino, es un líder. Y como tal, uno de los que debe bajar un mensaje claro para los que lo siguen.