Un juez de la Corte Suprema de Brasil dictó este jueves el ingreso “inmediato” en prisión del expresidente Fernando Collor de Mello (1990-1992), condenado a ocho años y diez meses de cárcel por corrupción, informaron fuentes oficiales.
El magistrado Alexandre De Moraes rechazó el último recurso del también exsenador y decretó el inicio inmediato de la ejecución de la pena impuesta, según señaló el Tribunal Supremo en una nota. Fernando Collor había sido condenado por los delitos de corrupción pasiva y blanqueo de dinero relacionados con Petrobras y derivados de la Operación Lava Jato.
El caso se remonta al año 2015, cuando la Fiscalía denunció a Collor por haber recibido sobornos por valor de 30 millones de reales (unos 6 millones de dólares, 5,6 millones de euros) entre 2010 y 2014. A cambio de ese dinero, Collor hacía posible, con nombramientos políticos, ventajosos contratos entre la empresa DVBR (Derivados do Brasil) y BR Distribuidora, una subsidiaria de la petrolera semiestatal Petrobras. Durante la investigación, la policía confiscó en su mansión de Brasilia un Porsche, un Ferrari y un Lamborghini. El expresidente siempre negó los hechos y aseguró que es inocente.
Collor duró poco en la presidencia porque sufrió el primer proceso de impeachment de la democracia brasileña. Los indicios de corrupción y fraude financiero y una masiva presión popular (el Movimiento de los caras pintadas) le apartaron del sillón presidencial, pero no del poder. Tras el periodo en que estuvo impedido de ocupar cargos públicos, en 2007 volvió a la política como senador por el estado de Alagoas, su gran feudo electoral.