Mónaco es glamour, velocidad y postales perfectas. Pero este fin de semana, entre Ferraris rugiendo y yates desbordados de champán, hay algo más que brilla distinto: un puesto de panchos que huele a casa y no solo es la bandera argentina flameando con orgullo.
Allí, en la Rue Grimaldi 31, la Asociación Mónaco Argentina (AMA) quiere convertirse en el epicentro de los hinchas de Colapinto y de Alpine. Su deseo más grande es que el argentino flamante piloto de la Fórmula 1 pase a tomarse un mate o probar uno de sus deliciosos panchos. Quieren que sepa “que hay un país entero empujándolo desde la vereda”.
“Hace 20 años que tenemos el puesto al lado del circuito, con el solo objetivo de recaudar fondos. En la semana de la carrera trabajamos desde las 7 de la mañana hasta que cierra el circuito”, cuenta con una sonrisa María Eugenia Rubinelli, alma mater de AMA y de este ritual que mezcla pasión por los fierros y vocación de ayuda.
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Todo comenzó con una boda en 2003: ella, argentina; él, italiano; se casaron en Mónaco y decidieron convertir los regalos en donaciones. “Nuestra primera acción fue ayudar a un geriátrico en Argentina. Así nació AMA, y no paramos más”, recuerda.
Hoy, AMA canaliza recursos hacia ONG argentinas enfocadas en salud, educación, deporte y protección ambiental. Y en este 2025, con Franco corriendo su segundo GP como piloto titular de Alpine, la efervescencia es total. “Queremos que pasen por nuestro puesto 198 mil argentinos, o al menos todos los que hinchen por Franco”, lanza con humor Michelle Rubinelli, portavoz del operativo Colapinto.
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La comunidad argentina en Mónaco no es grande –“seremos unos 30”, dicen- pero se agranda cuando hay un compatriota haciendo historia. Y este fin de semana, con el Principado recibiendo a más de 200 mil personas, no hay dudas de que el corazón nacional latirá fuerte al ritmo de los motores. “Queremos que Franco sienta nuestro aguante y que sepa que su carrera también deja huella fuera de la pista”, cierran desde AMA, que sorteará premios entre quienes visiten su Fan Zone y sigan la cuenta @nofinishlinearg.
En un circuito donde Fangio y Reutemann dejaron huella, donde correr ya es un triunfo y terminar, una épica, Colapinto va por su gloria. Y, quizás, por su primer pancho monegasco con sabor a patria.
