Tres exparamilitares, condenados a 40 años de cárcel en Guatemala por violar a mujeres indígenas

Tres exparamilitares, condenados a 40 años de cárcel en Guatemala por violar a mujeres indígenas

Un tribunal de Guatemala ha condenado a este viernes a 40 años de cárcel a tres exparamilitares por abusar sexualmente a seis mujeres indígenas durante los años más sangrientos de la guerra civil, en la segunda sentencia del caso conocido como Mujeres Achí. Durante el juicio, se ha escuchado la voz de Pedrina Ixpatá Rodríguez, una de las seis víctimas de las violaciones sucedidas en 1983, cuando en Guatemala se vivían los años más sangrientos de la guerra civil (1981-1983): “Me iban a tirar al cuarto [en el destacamento militar] y ahí entraban los soldados, y ahí me violaron… Ya no aguantaba, me dolía el cuerpo, me dolía la cintura… Sufrí un aborto, porque ahí me embarazaron”, ha declarado.

Ixpatá, originaria de Rabinal, Alta Verapaz, un pueblo indígena ubicado en el suroriente del país, estuvo encerrada por 25 días en el destacamento junto con su prima, Paulina Ixpatá, y otras mujeres que fueron interrogadas, torturadas y sometidas a abusos sexuales continuos.

“Su declaración tuvo un valor incalculable porque son delitos de soledad, son delitos que estigmatizan a la mujer y no es fácil que una mujer pueda relatar acerca de su violación. Estigmatizaron y estereotiparon no solo a la víctima, sino a su familia”, dijo María Eugenia Castellanos, presidenta del tribunal, durante la sentencia.

Pedro Sánchez Cortez, Simeón Enríquez Gómez y Félix Tum Ramírez son los exparamilitares sentenciados por los delitos contra los deberes de humanidad en forma de violencia sexual. Ellos estarán en prisión domiciliaria hasta que la sentencia quede en firme, según el tribunal.

El juicio inició el 28 de enero de este año. Durante el debate, se presentaron 168 medios de prueba para demostrar la responsabilidad de los acusados: 12 testigos, 10 peritos, 139 documentos y siete discos compactos con videos y documentos.

Este caso nació por las denuncias que 36 víctimas presentaron entre 2011 y 2015 contra exmilitares, comisionados militares y patrulleros de autodefensa civil por violencia sexual. En enero de 2022, se realizó el primer juicio contra cinco expatrulleros que fueron condenados a 30 años de prisión por estos hechos.

Al final de la audiencia, las personas que se encontraban en la sala aplaudieron por el veredicto. Mientras que afuera del edificio se colocaron mantas exigiendo justicia e integrantes de organizaciones de derechos humanos esperaban a las mujeres para celebrar el fallo.

“Este es un paso importante para las Mujeres Achí y para todas las mujeres víctimas de violencia sexual. Era el fallo que esperábamos y este estableció que las personas participaron como colaborados y por eso es que se aumenta la pena a 10 años de prisión”, comentó Lucía Xiloj abogada de las víctimas.

Según un comunicado de Impunity Watch y Mujeres Achí, este juicio fue relevante porque ilustró la forma en que el Ejército de Guatemala utilizó la violencia sexual como arma de guerra contra las mujeres indígenas durante el conflicto armado interno. El primer caso en el que se juzgaron esos delitos fue el de Sepur Zarco que logró sentencias a favor de las víctimas en 2016.