Ante una Colombia expectante y dividida, atenta a la sentencia del juicio contra el expresidente Álvaro Uribe que se conocerá el próximo lunes, el presidente Gustavo Petro y el expresidente Uribe volvieron a embarcarse en sus viejas rencillas políticas. En la mañana de este martes, el mandatario escribió a través de su cuenta de X un mensaje en el que señala “la enorme cantidad de presiones sobre la justicia que se ha desatado” por el mediático juicio contra Uribe, y dice estar comprometido con “proteger esa decisión, cualquiera que sea y a la persona que la profiera”. Un mensaje de respeto a la justicia cuando la tensión sube rápidamente a la espera de si el expresidente será absuelto o no, y lo que esto podría implicar para el país.
El mandatario también indicó que “quien ejerza el oficio de juez, hombre o mujer, tiene el deber y el derecho de actuar con total imparcialidad, independencia y objetividad”. No obstante, el que debía ser un parte de tranquilidad generó un desencuentro entre los políticos por cuenta de un fragmento de la publicación de Petro en el que este afirma que nunca, siendo presidente, se ha pronunciado sobre el caso judicial contra el expresidente. Entonces Uribe, trinos en mano, salió a rebatirlo.
“Presidente Petro, deje el vicio de mentir”, le dijo Uribe, quien prosiguió a citar una publicación hecha por el mandatario en esa misma red social, el 9 de abril de este año. En ella, Petro se refirió al caso judicial e hizo una reflexión sobre “la alianza entre políticos poderosos y el narcotráfico paramilitarizado”, un tema que acaparó sus denuncias en sus tiempos como senador. Desde el 2007, cuando Petro hizo un debate sobre el paramilitarismo en Antioquia, el hoy mandatario ha denunciado los presuntos vínculos entre el expresidente y grupos paramilitares; una acusación que Uribe ha negado fehacientemente, y que es hoy el telón de fondo de un juicio en el que es juzgado por soborno, manipulación a testigos y fraude procesal, por supuestamente buscar manipular testigos para que desviaran estas acusaciones en su contra.
En el trino citado por Uribe, Petro resalta la figura de Iván Cepeda, senador del partido de izquierda Polo Democrático, quien continuó con esta investigación y a quien el expresidente inicialmente denunció por calumnia agravada y fraude procesal. No obstante, el proceso terminó dando un giro de 180 grados y fue el expresidente Álvaro Uribe quien terminó sentado en el banquillo de los acusados, siendo juzgado por la justicia ordinaria en audiencias transmitidas y seguidas en vivo por millones de personas en todo el mundo. “La diferencia entre las dos víctimas, con sus padres asesinados, es que Iván perdonó y Uribe no pudo perdonar, lo carcomió el odio y la venganza. Cuando esto pasa, el odio transforma a la víctima en victimario, por eso perdonar es fundamental para salvar el alma, para salvarse a sí mismo”, dijo Petro en dicha publicación de abril.
Uribe también menciona otra publicación en la que Petro recuerda un trino de él mismo, hecho en 2018, cuando el líder de izquierdas era candidato para la presidencia de Colombia por segunda vez. En esa publicación, Petro relaciona al expresidente con la muerte del futbolista Andrés Escobar, un asesinato ocurrido en 1994, en un tiempo de alta tensión política en el país, y sobre el que aún no hay total claridad respecto a sus autores; el entonces candidato tampoco mostró pruebas que pudieran relacionar a Uribe con dicho caso. Finalmente, la tercera publicación en X con la que el expresidente busca demostrar que Petro sí se ha pronunciado sobre su caso es una que hizo el 17 de noviembre del año pasado, a raíz de la sentencia absolutoria de primera instancia en favor del hermano del expresidente, Santiago Uribe, en un proceso en el que era juzgado por sus presuntos vínculos con el paramilitarismo.
En ese momento, pese a que la justicia falló a favor de Santiago Uribe, el presidente Petro hizo un recuento de la que él consideraba la “historia verdadera de los 12 apóstoles”, un grupo paramilitar que operó en Antioquia y que, de acuerdo con varias investigaciones, era financiado por los ganaderos de la región y funcionaba como un grupo de limpieza social. Petro ha apuntado a que tanto el expresidente Uribe como su hermano, Santiago, hicieron parte de dicha organización, algo que no ha sido afirmado por la justicia colombiana. Fue ese trino el que terminó de sellar el distanciamiento entre ambos políticos que, pese a ubicarse en las antípodas ideológicas, habían logrado una especie de tregua pocos días después de que Petro asumiera la Presidencia y que alcanzó a durar poco más de dos años.
Ante los trinos que recordó Uribe, el presidente Petro se mantuvo firme al mensaje inicial. Respondió que el expresidente “quiere mis pronunciamientos sobre sus actuaciones y mis anteriores debates como congresista. Pero no lo puedo hacer ahora. Cuando decisiones judiciales, que debo respetar y no influir para nada, se van a tomar. Otro día, más adelante, quizás hago un libro sobre mis debates. Por ahora guardo mi silencoo (sic)”.
Uribe levantó el guante de nuevo, mirando hacia aquel futuro y a aquel posible libro. “Sobre la amenaza que me lanza el Ptde Petro la recibo como la de un cobarde que ha venido perdiendo la capacidad de embolatar a los colombianos”, escribió. “Estaré listo para repetirse en la cara, ojalá más cerca, lo que le dije en el Senado: Sicario Moral”. El expresidente luego se refirió a los “señalamientos” que hizo Petro contra el senador Miguel Uribe Turbay, antes de que este sufriera un atentado a principios de junio. “Jamás he buscado un pronunciamiento del Pte Petro que me favorezca”, añade.
La mirada queda puesta sobre la juez Sandra Heredia, quien decidirá si el expresidente es culpable o inocente. Ambas orillas, desde lo que consideran justo, le piden lo mismo: “fallar en Derecho”.