Tras acordar la unidad y la centralidad de Cristina Fernández de Kirchner en la sede del PJ nacional, las tribus del peronismo bonaerense comenzaron a desplegarse en el territorio con la mirada puesta en las elecciones del 7 de septiembre. Sin definiciones sobre el armado de listas, Máximo Kirchner recorrió Villa Tranquila, en Avellaneda, bajo la consigna #ArgentinaConCristina. En paralelo, el Movimiento Derecho al Futuro, que encabeza Axel Kicillof, organizó una serie de plenarios en distintas secciones de la provincia. Desde Santa Clara, el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, reclamó “que se respete la conducción política en la provincia del gobernador” y advirtió que podrían “ir por separado” si no se contemplan las condiciones del MDF. Convertido en interlocutor entre los distintos sectores, el intendente de Lomas de Zamora, Federico Otermín, buscó bajar el tono: “Va a primar la seriedad y la coherencia de todos los actores”, aseguró. En La Plata apuestan a concretar cuanto antes la mesa política que Axel Kicillof anunció a comienzos de la semana con Máximo Kirchner y el Frente Renovador. Al cierre de esta edición no descartaban que pudiera ser este domingo, aunque el resto de los involucrados aún no estaba al tanto.
Con espíritu de largada a lo largo y a lo ancho del país se realizó la primera Jornada Nacional de la campaña federal y permanente Argentina con Cristina. Las actividades fueron desplegadas desde Ushuaia a La Quiaca. Coordinada por el PJ nacional, junto a partidos políticos, organizaciones sindicales, sociales y civiles que confluyeron en la multitudinaria marcha del 18J en Plaza de Mayo, la iniciativa busca sostener en el tiempo la visibilización del reclamo por la libertad de Cristina Fernández de Kirchner y denunciar su proscripción fruto de un entramado de persecución política. Como parte de esas actividades, Máximo Kirchner recorrió Villa Tranquila, en Avellaneda, junto al senador provincial Emmanuel Santalla. Entre mates y caminatas, dijo a los vecinos: “Así se construye: juntos, pueblo por pueblo, metro por metro. Vamos a ir para adelante para que en 2027 construyamos otra vez una Argentina que intente contenernos y abrazarnos a todos”.
Pese a que su nombre suena como uno de los posibles candidatos a encabezar la lista en la Tercera Sección Electoral, en las últimas horas la idea se empezó a desdibujar. El intendente de Lomas de Zamora, Federico Otermín, señaló en declaraciones radiales a AM 750: “Máximo Kirchner planteó con mucha claridad que ir a la Tercera Sección le genera mucha incomodidad personal y política”. Aun así, quien hoy oficia como interlocutor permanente entre el gobernador de la provincia de Buenos Aires y el presidente del PJ bonaerense sostuvo ante este diario: “Todo el proceso que se viene dando es muy positivo. De acá al 19 de julio correrán ríos de tinta, pero llegaremos juntos a buen puerto”.
El mensaje optimista de Otermín, en línea con los ejes trabajados el viernes en la sede del PJ nacional, contrastó con las declaraciones del ministro bonaerense Carlos Bianco. Desde Santa Clara, en la Quinta Sección Electoral, Bianco relativizó los alcances del acuerdo: “La unidad requiere disciplina partidaria, como mínimo”, dijo, en una reedición de la frase que ya generó ruido en distintos sectores del peronismo cuando reclamó que había que levantar la mano “sin chistar”. Sus declaraciones volvieron a tensar el mapa trazado desde la calle Matheu, al no descartar la posibilidad de una ruptura.
Durante ese mismo encuentro, Bianco describió tres escenarios posibles: “El escenario uno es trabajar una unidad de conjunto, no solo para hacer las listas”, explicó. “El segundo escenario —y puede que no ocurra, porque otros sectores pueden no estar de acuerdo— es hacer listas conjuntas, que terminemos cerrando con determinadas proporciones”. Finalmente, se refirió al escenario más catastrófico: “La tercera opción, la peor, es ir separados, porque el objetivo político ya no será ganar, sino sacar el mayor porcentaje posible. Con el peronismo dividido, le vamos a dejar servida la pelota a Milei para que avance con la motosierra”.
Así, quien forma parte del armado bonaerense expuso la tensión que atraviesa el proceso de unidad según la óptica del Movimiento Derecho al Futuro. “Hoy la discusión está acá —dijo ante los presentes—. Va a haber reuniones durante estos días donde nuestra propuesta va a ser ir en unidad. Si no se puede ir en unidad, listas conjuntas, pero respetando la conducción política en la provincia de Buenos Aires del gobernador. Y si tampoco se puede eso, bueno, muchachos, tendremos que salir a la cancha nosotros”.
Los dichos fueron respondidos en su cuenta de X por el ex intendente de San Antonio de Areco Paco Durañona que ironizó: «Se consolida la «Sin Chistar», agrupación conducida por Axel y su alter ego Bianco en la búsqueda de consensos y acumulación.» La cuestión de la conducción y el liderazgo de Axel Kicillof es uno de los ejes que divide aguas. En La Plata sostienen que, por ser el gobernador, debe encabezar la estrategia y tener la lapicera. “Para el MDF, el rol que tiene que tener Axel es absolutamente decisivo, y su liderazgo ya trasciende la mera condición de gobernador”, sostuvo este sábado el intendente de Morón, Lucas Ghi, durante uno de los plenarios del espacio. Un conocedor del PJ provincial, en cambio, dijo a este diario: “Axel tiene que entender que es una de las patas más importantes dentro del peronismo, en la que también están Cristina Kirchner y Sergio Massa. Si renuncia a esa pretensión de disputar la conducción del peronismo en 2025, se resuelve todo”.
Sobre la posibilidad de que el peronismo enfrente las elecciones con listas separadas, un dirigente que participa de la ingeniería electoral de la provincia dijo a Página/12: “No creo que hagan eso. Es suicida”, en referencia a la advertencia de Carlos Bianco. Y agregó: “Los intendentes no se lo van a permitir”. A su entender, las tensiones responden a una disputa por el control de las cabezas de lista en las secciones de la provincia, lo que representa, según consideró, una maniobra arriesgada: “No tienen referentes de peso para las ocho secciones”.
Otro problema que atraviesa el armado es la fragmentación del liderazgo territorial. “Incluso si jugara Máximo en la Tercera, el axelismo no lo va a militar. Por eso la figura de Cristina resolvía un problema en una sección clave”, explicó la fuente. En efecto, la Tercera Sección representa un caudal electoral de unos cinco millones de votantes que el peronismo no puede darse el lujo de perder.
Por su parte en el Frente Renovador ya delegaron todas las atribuciones a sus apoderados y a Sergio Massa para definir las candidaturas. “Resta ver cómo se resuelve el frente y la constitución del esquema de apoderados y junta electoral”, señaló uno de los armadores a Página/12. En el último congreso del FR, un intendente le preguntó a Massa qué harían si finalmente no se lograba consolidar la unidad. La respuesta fue clara: “Vamos solos. Juan (Andreotti) sería un gran candidato a senador por la Primera, vamos a ir con un famoso o una famosa por la Tercera, y en el resto de las secciones vamos a poner a nuestros intendentes encabezando”, explicó. A pesar de eso, Massa les recordó a los más de 200 participantes: “La unidad se construye con generosidad. No hay margen para mezquinos. Esto es peronismo o es Milei”
Además de las múltiples reuniones para avanzar en el armado de listas, el próximo sábado 5 de julio el PJ bonaerense celebrará su Congreso Provincial, presidido por Fernando Espinosa. El encuentro será en el Teatro Municipal Enrique Santos Discépolo de Merlo, donde se aprobarán las alianzas electorales. Será una jornada clave para saber si finalmente se alcanzó la unidad.