Al menos 29 niños mueren al estrellarse un avión militar contra un colegio en Bangladés | Internacional

Al menos 29 niños mueren al estrellarse un avión militar contra un colegio en Bangladés | Internacional

Los muertos en el accidente aéreo de este lunes en Daca, la capital de Bangladés, se elevan ya a 31, según las autoridades del país, que han precisado que, de ellos, 29 eran niños, en muchos casos menores de 12 años. Este dato se ha conocido este martes, a medida que los equipos de rescate han ido rescatando los cuerpos de los edificios carbonizados contra los que impactó un avión de las Fuerzas Armadas de Bangladés, que se estrelló contra las instalaciones del colegio Milestone. Las autoridades bangladesíes han informado también de que 68 personas siguen recibiendo tratamiento en hospitales; de ellos, 10 en estado crítico.

“Entre los muertos, 29 son niños —muchos menores de 12 años— con heridas por quemaduras extensas. Otras dos víctimas son el piloto de la aeronave y una profesora de la escuela”, ha precisado ante los periodistas Sayedur Rahman, asesor de Sanidad del gobierno interino de Bangladés. Cuando el avión impactó en la escuela, los alumnos se encontraban aún en el interior del colegio, lo que explica el elevado número de menores fallecidos.

El avión, que llevaba a cabo una misión de entrenamiento, se estrelló el lunes nada más despegar poco después de la una de la tarde, las nueve de la mañana en horario peninsular español, de la base aérea de Kurmitola, en la capital. Según el ejército, la causa del accidente fue un fallo mecánico del aparato.

Fuentes militares bangladesíes han indicado que el piloto, antes de estrellarse, intentó desviar el avión para evitar que cayera, como al final sucedió, en una zona densamente poblada. No lo logró y la aeronave chocó contra un edificio de dos plantas de la escuela Milestone, que acoge a alumnos de entre cuatro y 18 años.

Las imágenes mostraron luego a los equipos de rescate rastreando los edificios carbonizados en busca de supervivientes y cadáveres, mientras familiares angustiados rodeaban el lugar, incluidos algunos padres que habían acudido ante las puertas del centro para recoger a sus hijos.

El avión siniestrado era un F-7 BGI biplaza de entrenamiento, el modelo más avanzado y reciente de los cazas chinos Chengdu J-7/F-7, que a su vez es una versión del MiG-21 ruso, según la agencia Reuters. Bangladés firmó un contrato con Pekín para adquirir 16 de estos aviones en 2011 y las entregas se completaron en 2013.

El Gobierno anunció después este martes como día de luto. Las banderas ondean a media asta en el país y muchos habitantes de Daca se acercaron en las horas posteriores al accidente al hospital de grandes quemados de la capital bangladesí para donar sangre.

Por su parte, estudiantes de la escuela y de universidades cercanas protestaron el martes cuando dos funcionarios del Gobierno visitaron el lugar del accidente, exigiendo una cifra exacta de muertos y gritando: “¿Por qué murieron nuestros hermanos? ¡Exigimos respuestas!”. En otras partes de la capital, cientos de estudiantes, algunos de ellos blandiendo palos, irrumpieron en la puerta principal de la secretaría del Gobierno federal, exigiendo la renuncia del asesor de educación, según imágenes de la televisión local. La policía utilizó gas lacrimógeno para dispersar a estudiantes.

Este accidente se produce poco más de un mes después de que un avión de Air India estrellara en el campus de una facultad de Medicina en la ciudad india de Ahmedabad. Solo sobrevivió un pasajero de las 242 personas a bordo del aparato. El impacto de la aeronave mató además a 19 personas que estaban en tierra, convirtiéndose así en la peor catástrofe aérea del mundo en una década.