La guerra entre el Gobierno y la AFA tuvo otra batalla esta semana. Y si antes hubo diferencias con las Sociedades Anónimas Deportivas, ahora la pelea recrudeció con la vuelta del público visitante. En todas estas discusiones, hubo un protagonista y no fue el presidente Claudio Tapia. Pablo Toviggino, tesorero y espada mediática de la casa madre de la pelota, alzó la voz. Y hasta se le animó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, a quien amenazó a través de las redes sociales, lo que derivó en una carta documento de Patricia Bullrich.
“Vomita violencia”, describió la Ministra de Seguridad de la Nación al referirse a la respuesta de Toviggino al cuestionamiento que hizo Francos sobre la decisión que tomó Tapia, que dos parcialidades antagónicas compartan el mismo escenario, algo que no ocurría desde 2013, tras la muerte de Javier Gerez -miembro de la Subcomisión del Hincha de Lanús- en el estadio Ciudad de La Plata en un partido entre Estudiantes y Lanús.
En la administración de Milei sospechan que el impulso de ‘Chiqui’ está vinculado a una cuestión netamente política, que se explotó con la apertura de la cancha ‘granate’ para los hinchas de Rosario Central, aprovechando la presencia de Ángel Di María. De cara a las elecciones bonaerenses, y teniendo en cuenta que en CABA están negados a ser anfitriones, lo observan como un guiño a Axel Kicillof. La relación con el gobernador se estrechó con la firma de un acuerdo entre la AFA y la Provincia para la disputa de dos amistosos de la Selección Argentina en la cancha platense. No es el único mandatario provincial con quien se muestra Tapia. En las últimas horas, por ejemplo, se dejó ver con el entrerriano Rogelio Frigerio y con el santafesino Maximiliano Pullaro.
Envalentonado, este miércoles, Toviggino le contestó a Bullrich. Se amparó en la Constitución Nacional y manifestó: “Deseo un país libre de políticos como Ud y Dientes Amarillos, en mi opinión es de persona de bien, que quiere a su patria y pretende lo mejor para sus conciudadanos”. La referencia odontológica tiene que ver con Francos, quien aseguró que el tesorero tiene “los dedos manchados de verde, por lo que toca” en una clara alusión al color del billete de dólares.
La relación entre el Gobierno y la AFA está resquebrajada, muy a pesar que Tapia se sacó junto a Karina Milei y Manuel Adorni en diciembre del año pasado, en ocasión de la presentación del Mundial 2030 en Paraguay. El presidente la AFA les regaló la camiseta de la Selección Argentina.
Lo que pareció una tregua después de los cimbronazos que hubo por la oficialización de las SAD que estableció el decreto 70/2023, luego frenado por la Justicia Federal, fue escalando hasta reventar producto de los posteos de Milei contra Tapia y el belicoso rol de Toviggino, quien ostenta el real poder.

El tesorero nació en Rosario, pero está afincado en Santiago del Estero, donde construyó su imperio y los vínculos políticos, entre ellos con el gobernador Gerardo Zamora. Es dueño de establecimiento hípico, donde se entrenan sus hijos. Fue dirigente de Comercio Central Unidos, un pequeño club de fútbol, y en 2011 llegó a la Liga Santiagueña, su plataforma para corporizarse en el líder del Consejo Federal, del que forman parte más de 3.500 clubes en 233 ligas del interior.
No es casual que los equipos santiagueños hayan pasado de jugar en el Federal A a llegar a Primera, como el caso de Central Córdoba que incluso se clasificó a la Libertadores y actualmente disputa la Sudamericana, o pelear por un ascenso, como Mitre, Güemes y Sarmiento de la Banda. Y tampoco es una sorpresa que hayan construido un estadio de primer mundo en una de las provincias más pobres del país. Se invirtieron 80 millones de dólares para levantar el Madre de Ciudades, sede de la mayoría de las finales y partidos trascendentes de la Liga Profesional.
Toviggino llegó a la AFA mucho tiempo antes de que Tapia imaginara que podía ser el dirigente más fuerte de la Argentina y uno de los más poderosos del continente, ya que fue designado representante de la Conmebol ante la FIFA. Fue uno de los integrantes de la Comisión Normalizadora que se hizo cargo del control del fútbol argentino en 2016 tras el tristemente célebre 38 a 38 en las elecciones de diciembre de 2015. Entonces, formaba parte de un cuarteto que presidía Armando Pérez, ex mandamás de Belgrano; Javier Medín, ex dirigente de Boca; y Carolina Cristinziano, abogada de Conmebol y esposa de Gonzalo Belloso, ex delantero y actualmente presidente de Rosario Central.
Fue Mauricio Macri, por entonces Presidente de la Nación, el que motorizó la intervención a través de su relación con Gianni Infantino, titular de la FIFA. Daniel Angelici, por entonces al frente de Boca, eligió a Tapia, yerno de Hugo Moyano y cercano a la Selección Argentina, como el candidato a presidente. La relación con Toviggino fluyó y, casi una década después, forman un dúo inseparable en el que Chiqui es el ‘Comandante’ para el dirigente de Santiago del Estero.
Toviggino supo tejer alianzas en su provincia y también, a nivel nacional. Apoyó a Sergio Massa en la campaña de 2023. Incluso, se mostraron juntos durante la presentación del primer partido del Mundial 2030. “Yo sé que vas a conducir muy bien a partir de diciembre”, le dijo Chiqui al entonces ministro de Economía. Su deseo no fue cumplido porque se impuso Milei.
La pelea con Bullrich y Francos no fue la única que protagonizó Toviggino. También se cruzó con Andrés Fassi por el arbitraje de Andrés Merlos, el año pasado en la Copa Argentina durante un partido con Boca. El recelo venía de antes porque el presidente de Talleres es afín a las SAD. Por idéntico tema se enfrentó a Javier Zanetti. Lo mismo sucedió con Juan Sebastián Verón, quien intentó cerrar un acuerdo con Foster Gillett, empresario norteamericano que invirtió US$ 25 millones entre el pase de Cristian Medina y un préstamo para otros gastos. Y con Carlos Tevez, cuando era DT de Independiente, por la relación que tiene con Macri y el negocio de los parques eólicos.
Siempre a través de su cuenta de ‘X’ (antes Twitter) y sin filtros. Aunque ahora amplió su horizonte en los medios con la millonaria inversión en Carnaval Stream, un canal en el que participan Jorge Rial, Fabián Doman, Viviana Canosa y Alejandro Fantino. Desde allí también manda mensajes. ¿Será por eso que el ex presidente de Independiente criticó la posibilidad lejana de que vuelva la Fórmula 1 a Buenos Aires, justo después de que Jorge Macri anunciara el retorno del MotoGP en detrimento de Santiago del Estero?