Recio, duro, con cara de malo. Así llegó a Boca hace ya más de 20 años y así se mostró durante sus dos ciclos en el club, desde donde siguió su carrera hasta pegar la vuelta y terminar trabajando en el predio de Ezeiza con los colores que lo terminaron identificando luego de retirado. Pero algo empezó a cambiar en Daniel Díaz -el Cata- en los últimos tiempos, y en estas vacaciones se pudo destacar aún más su nueva imagen.
Es que el ex marcador central ahora luce una cabellera que contrasta con su habitual y característica cabeza calva, y eso genera tanta sorpresa que muchos no habrán advertido en las imágenes que se difunden desde Boca Predio que ese morocho de peinado con jopo es el mismo que llevó la 6 en la última conquista del Xeneize en la Copa Libertadores de América, allá por 2007.
Nuevo amor
Incluso, esta versión del Cata en la playa destaca otro giro en su vida, y tiene que ver con el amor. En las redes se lo ve muy enamorado de su actual pareja, Julieta Bielawski, y ya no aparece a su lado su mujer de sus tiempos de jugador (Celeste Marzella) quien supo ser una férrea defensora en los primeros tiempos de redes sociales ante críticas para con las aptitudes de su marido.
Claro, es que así como tuvo de las buenas, también a Díaz le tocó pasar momentos más complejos en el club, como cuando el tercer ciclo de Carlos Bianchi en Boca no resultó tal lo deseado o en su despedida luego de la eliminación de la Copa 2016 ante Independiente del Valle en la Bombonera.
Como todo cambia, ahora el Cata sonríe. Más de lo que lo hacía en la cancha, cuando tenía que enfrentar a los delanteros rivales. Y así, desorienta a todo aquel que quiera emparentarlo con el temible defensor que supo ser.



















