Gustavo Costas no suele andar con vueltas en cada conferencia de prensa. Se sienta, se acomoda, levanta la vista, ensaya una mueca de sonrisa a la espera de las preguntas de los periodistas y contesta sin filtro. Y tras el empate sin goles ante Independiente en el Cilindro, el entrenador de La Academia fue clarito al momento de explicar porqué su equipo no pudo superar a un rival que venía muy golpeado.
“Empezamos bien, tuvimos muy buenos 25 minutos. Después nos quedamos sin piernas, aunque no es excusa. Erramos pases tontos y le dimos vida. Luego nos quedamos y nos costó muchísimo, y muchas veces quedamos mal parados. No podemos tener tantas desatenciones”, remarcó Costas, que, a su vez, explicó las decisiones sobre algunas presencias y algunas ausencias para dosificar piernas: “Teníamos planificado darle descanso a Santiago Sosa, sobre todo porque venía con una molestia. Nos arriesgamos, pero terminó bien”.
Le dejó el tema del arbitraje a la dirigencia y se enfocó en el duelo del jueves contra River por la Copa Argentina: “Tenemos tres días para descansar y pensar en River. Es difícil mantener al plantel al cien por ciento desde lo físico. Lo lindo es que se juega seguido, Almendra llega pero Solari es difícil”.
Y agregó en este sentido: “Lo mejor que nos puede pasar es que todos quieren estar. Incluso, algunos se enojan porque los tenemos que cuidar, pero quieren estar para llevar a Racing a lo más alto”.
Santiago Sosa, por su parte, no se guardó nada y realizó un profundo análisis de la igualdad: “Nos faltó tocar un poco más en el segundo tiempo. En el primero, sobre todo al principio, atacamos muy bien y los llevamos por delante. Después nos quedamos, ellos hicieron un poco de bastante tiempo… En el segundo no fuimos claros y tiramos muchos pelotazos que a veces sirve y hoy no nos sirvió. La sensación es de bronca. Quizá termina siendo justo el empate, qué se yo…”.
