hoy recomienda Laura Leibiker, de Siglo XXI

hoy recomienda Laura Leibiker, de Siglo XXI

Locutora, periodista y editora. No hay área en la que los libros habiten que Laura Leibiker no haya explorado. Trabajó en TV, radio y revistas destinadas al público infantil. Por eso, si hoy fuera una niña y solo tuviera que elegir un título responde casi con desesperación: «Me parece muy difícil elegir solo uno… ¡porque ningún libro es suficiente para un buen lector!»

Desde 2006 se dedica a la edición de literatura para niños y jóvenes. Primero, se desempeñó como directora Editorial de Literatura Infantil y Juvenil en Editorial Norma y ahora está editando la nueva colección infantil de Siglo XXI.

Y a pedido de Clarín, Laura Leibiker revisa el rol de los libros en su vida y recomienda esos imperdibles para chicos y chicas.

–Si fueras peque ahora, ¿qué libro no te perderías por nada del mundo?

–Me parece muy difícil elegir solo uno… ¡porque ningún libro es suficiente para un buen lector! Un libro siempre despierta el deseo de leer otro, de seguir leyendo. Pensando en la niña que fui, tiene que ser un libro gordo, de muchas páginas. Voy a hacer un poco de trampa: no es un libro, son tres, pero bien podría ser un gran libro gordo: La saga de los confines, de Liliana Bodoc. Una trilogía en la que cabe el mundo: el poder, el amor, la lucha, la furia, la solidaridad y la idea de comunidad y de futuro. Si pensamos en una “yo” más pequeña, me inclino por la saga Una serie de eventos desafortunados, de Lemony Snicket.

–¿Qué recordás de tus lecturas de infancia, qué libros había o llegaron a tu casa y qué encontrabas en la escuela?

–Fui una niña muy lectora; me nutría de lo que había en casa: desde la guía de teléfono hasta las colecciones Robin Hood e Iridium, los libros de Constancio Vigil de editorial Atlántida (El mono relojero, El imán de Teodorico); Un elefante ocupa mucho espacio, de Elsa Bornemann; Reportajes supersónicos, de Syria Poletti. ¡Y todo lo que caía en mis manos! Revistas, cómics, historietas: desde la revista Smart (de juegos de ingenio) hasta las historietas Susy, secretos del corazón; Patoruzú, Isidoro, y las geniales Intervalo, El Tony y D’Artagnan. También la revista Humor, las historietas de Mafalda y libros de cuentos como Caramelos surtidos o Cuentos para chicos de autores grandes. Algunos de mis preferidos eran los de José Mauro de Vasconcelos: Vamos a calentar el sol, Mi planta de naranja-lima, El jardín japonés, Rosinha, mi canoa… Y Los capitanes de la arena, de Jorge Amado. De las lecturas escolares recuerdo Cuadernos de un delfín, de Bornemann.

–¿Cómo elige la editorial los libros que va a publicar y cómo se construye un libro para chicos?

–Siglo XXI comenzó a editar para chicos hace poco más de un año. La selección para la publicación se nutre de los temas o ejes que atraviesan el catálogo de adultos (ciencias, pensamiento político y social, textos de no ficción) a los que se suman libros para los más chiquitos y, próximamente, textos de ficción. El proceso de edición es muy grato: partimos, por lo general, de una idea previa que conversamos con los autores de los textos; luego se trabaja la edición (el “amasado” del texto, su adecuación al lector objetivo, la extensión adecuada) y la puesta en página. Como somos un proyecto muy nuevo, los primeros desarrollos incluyeron el diseño de colección (formato, estética, materialidad). Con esas cuestiones definidas, hacemos un maquetado y elegimos al ilustrador que nos parece más adecuado para completar el sentido de ese texto. Revisamos los bocetos, hacemos varios idas y vueltas entre el escritor, el ilustrador, el diseñador y el editor para ir dando forma al libro que soñamos. Para las tapas solemos armar varios bocetos (tanto de diseño como de ilustración) que se someten a una discusión con el equipo editorial: nos interesa que resulte atractiva, que se diferencie en el punto de venta y que, a la vez, exprese muy claramente el espíritu del libro que encontrará el lector cuando lo abra.

–¿Qué título del catálogo de la editorial tiene una historia especial que puedan contar?

Un mar de fueguitos, de Eduardo Galeano, ilustrado por Poly Bernatene. La obra de Galeano es muy importante para Siglo XXI. Por eso, uno de los primeros proyectos fue seleccionar algunos de sus textos para hacer un álbum para chicos. Convocamos a Poly, que es un ilustrador con un manejo increíble de luz y sombra en sus trabajos. Sabíamos que el texto de Galeano es muy popular y cada uno tiene, en su cabeza, una imagen posible del “mar de fueguitos”. Trabajamos varios meses con Poly, que releyó los libros de Eduardo para encontrar imágenes, ideas, conceptos que lo ayudaran a ilustrar este libro. El resultado es sorprendente y emocionante, y gusta tanto a chicos como a grandes. Por eso, ya estamos pensando en otros libros con textos de Galeano para chicos.