Boca vuelve este martes a los entrenamientos luego de las mini vacaciones que tuvo el plantel tras el Mundial de Clubes y ese final amargo que dejó el decepcionante empate ante Auckland City que marcó la despedida de Estados Unidos. Y todo gira alrededor del nombre de Leandro Paredes, cuyo regreso parece estar más cerca que nunca de concretarse. Ahora bien, ¿qué falta para que el campeón del mundo pegue la vuelta y se ponga bajo las órdenes de Miguel Ángel Russo?
Hace algunos días se confirmó que el mediocampista de la Selección Argentina le había dado el sí a Juan Román Riquelme. Se trató de un enorme paso, pero la operación no terminó de cerrarse. Es que todavía no se ejecutó la clausula de salida de Roma, que está tasada en 3,5 millones de dolares. Se espera que esta semana el club le transfiera ese dinero a Paredes para que pueda ejecutarla. Así, ya liberado, el siguiente paso será que firme el contrato que lo unirá por tres años y medio con el club de la Ribera.
El jugador se encuentra en el ultimo tramo de sus vacaciones. Volvió a la Argentina tras pasar un puñado de días en Miami -incluso presenció el encuentro entre su futuro equipo y Benfica, por la fecha inicial del Mundial de Clubes-. Debería retornar en breve a Italia para reintegrarse a los entrenamientos con la Loba. Pero eso no sucederá, ya que todos los caminos de Paredes conducen a la Boca.
«Lo que te puedo decir es que él tiene las puertas abiertas del club. Leandro, ustedes saben la relación que tengo con él, tiene las puertas abiertas de nuestro club, eso es todo lo que puedo decir», fueron las últimas palabras de Juan Román Riquelme sobre Paredes. El presidente ídolo, en diálogo con El Canal de Boca, evitó dar fechas y cualquier tipo de precisión antes de emprender regreso desde Estados Unidos. Es que el dirigente sabe que pueden surgir algunos contratiempos hasta que todo quede sellado. Será, eso sí, el mejor refuerzo de su era. Es que el regreso del futbolista se producirá a los 31 años -los cumplió y los festejó el domingo- y en un nivel altísimo.
Consumado el retorno de Paredes, Riquelme y el Consejo de Fútbol no se quedarán ahí y seguirán activos en el mercado de pases con vistas a lo que viene -para Boca será la Copa Argentina y el Torneo Clausura, donde buscará el ticket para jugar la Libertadores luego de dos años de ausencia-. La idea es, tras el golpe de efecto, generar un cambio de are en el vestuario que comanda Miguel Russo. Por lo tanto, se espera la salida de varios jugadores que tienen la etiqueta de ciclo cumplido, con Marcos Rojo a la cabeza. Y, por qué no, algún que otro refuerzo de jerarquía para apuntalar al mediocampista de la Scaloneta.
