El ex diplomático Diego Guelar advirtió que Argentina no puede adoptar una posición neutral en el conflicto entre Israel e Irán debido a los atentados terroristas perpetrados contra objetivos judíos en Buenos Aires hace más de tres décadas. «No hay neutralidad posible«, aseguró el ex embajador al analizar la escalada del conflicto en Medio Oriente.
Guelar, quien se desempeñó como embajador argentino en China, Estados Unidos, la Unión Europea y Brasil, fundamentó su posición en los ataques terroristas del 17 de marzo de 1992 contra la Embajada de Israel, que causó 22 muertos y 242 heridos, y del 18 de julio de 1994 contra la sede de la AMIA, que dejó 85 personas asesinadas y 300 heridas.
El Gobierno elevó a «medio» el nivel de seguridad en la Argentina
«Nosotros no podemos ser neutrales porque Irán es un Estado que, según nuestra Corte Suprema, perpetró dos atentados de una gravedad extraordinaria en nuestro país», explicó el diplomático en Última Pregunta por Radio Continental Córdoba, y agregó: «Nos ha agredido. Prácticamente estamos en estado de guerra con Irán por decisión de Irán, no por decisión argentina”.
Críticas a Milei pero respaldo a la posición estratégica
El ex embajador reconoció que Argentina mantiene una relación histórica con Israel desde hace 76 años, pero criticó las «sobreactuaciones» del presidente Javier Milei en el manejo del conflicto.
«Argentina es amiga del Estado de Israel y hace 30 años Irán nos declaró la guerra con dos atentados en la Argentina en 1992 y 1994», puntualizó Guelar. «Lo que a mí no me gusta son las sobreactuaciones del presidente en muchos aspectos, incluyendo este», señaló, aunque aclaró que la posición argentina es «objetiva» más allá de las formas del mandatario.
El peligro nuclear iraní
Guelar describió a Irán como «un país poderoso, grande, rico, que está bajo un régimen teocrático, religioso y dictatorial» con «muchos antecedentes en los últimos 40 años de acciones terroristas». El diplomático alertó sobre el programa nuclear iraní, citando informes del argentino Rafael Grossi, director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica.
Según explicó, Irán ha alcanzado un enriquecimiento de uranio superior al 60%, cuando para usos civiles solo se requiere 3% y para armas nucleares se necesita 90%.
«En función de la cantidad de uranio que tiene, el cálculo del propio Grossi es que podría ser a corto plazo entre seis y ocho bombas de una capacidad destructiva enorme», alertó Guelar, quien considera que esta situación motivó el «ataque preventivo» de Israel.
Argentina en riesgo
El ex diplomático advirtió que Argentina debe entrar en «alerta máxima» al considerar que «somos muy cercanos aliados de EE.UU. e Israel» y que «Irán es, desde 1992, enemigo de Argentina». Explicó que solo dos países entre los 192 miembros de Naciones Unidas deben tener «especial cuidado» por las posibles venganzas terroristas de Irán: Estados Unidos y Argentina.
«Tenemos que ser conscientes de que estamos involucrados, mal que nos pese, pero estamos involucrados directamente en este conflicto», concluyó el ex embajador, quien también advirtió sobre los riesgos económicos globales, incluyendo un posible aumento en el precio del petróleo si Irán bloquea el estrecho de Ormuz.