otro factor clave suma preocupación a la caída del turismo extranjero

otro factor clave suma preocupación a la caída del turismo extranjero


La falta de precipitaciones, las altas temperaturas y la escasez de nevadas, generan preocupación en las provincias cordilleranas que promueven los deportes de nieve como una de los principales atractivos en el invierno.

El sector turístico de Mendoza registra uno de los peores julio de los últimos años, con caída del turismo extranjero por la suba de los precios en dólares y un baja del turismo nacional que prefiere viajar al exterior.

«En las tres primeras semanas de julio hemos tenido un 40% promedio de ocupación, muy bajo», confirmaron a Clarín, los gerentes de hoteles cinco, cuatro y tres estrellas del Gran Mendoza. El sur provincial, con San Rafael y Malargüe, han estado un poco más arriba entre el 60% y 70% de ocupación hotelera.

Si bien en el sector hotelero y gastronómico hay expectativas con el arranque de las vacaciones en Buenos Aires y CABA, hay otro factor que los afecta. «Falta el elemento principal, que es la nieve», sostuvo Floridor González, de la Asociación Malargüina de Turismo (AMATUR).

Muchos turistas cancelan o posponen sus vacaciones por la falta de nieve en la cordillera. «Teníamos reserva para Las Leñas, del 10 al 18 de julio, y lo hemos pospuesto para fines de agosto», cuenta Verónica, bioquímica, que todos los inviernos viaja con su familia al centro de esquí en Malargüe.

La escasez de nieve ha impedido al centro de esquí Las Leñas, en el sur de Mendoza, poder funcionar a pleno. Si bien han fabricado nieve artificial y han tenido alta ocupación en julio, los esquiadores se concentraban en pocas pistas y es complicado para la práctica del deporte.

En Las Leñas, el centro de esquí no puede funcionar a pleno por la falta de nieve. Foto Archivo / Delfo Rodríguez

El fin de semana solo han estado habilitadas las telesillas de algunos sectores: Iris, Apolo, Júpiter, Neptuno, Venus, Eros 1 y el parque aventura, a la espera de nevadas más importantes.

En la ruta 7 de alta montaña, que conecta Mendoza con la localidad de Los Andes, en Chile, prácticamente no hay nieve. Los Penitentes solo funciona como hospedaje y estacionamiento. El parque de nieve Los Puquios está cerrado. Y los turistas argentinos deben llegar hasta el centro de esquí chileno Portillo para poder esquiar o hacer culipatín.

A diferencia de otros inviernos, el paso Internacional Cristo Redentor ha estado habilitado las últimas tres semanas de julio, con horario de 9 a 21 horas. Siguen cruzando unas 4.500 personas por día a Chile, la mayoría en plan tour de compras.

Nevó en Bariloche

Este lunes, llegó la nieve al cerro Catedral, principal centro de esquí de Bariloche. Las precipitaciones fueron recibidas como una bendición porque coinciden con el arranque de las vacaciones de bonaerenses y porteños.

Desde el inicio del invierno, el centro de esquí más grande de la Argentina ha presentado un panorama desolador para los que buscaban la típica postal de invierno con nieve.

La caída de nieve en el cerro Catedral coincidió con el arranque de las vacaciones de invierno en Buenos Aires. Foto Euge NemeLa caída de nieve en el cerro Catedral coincidió con el arranque de las vacaciones de invierno en Buenos Aires. Foto Euge Neme

Los concesionarios de Catedral han recurrido a la fabricación de nieve con 40 cañones, que aprovechan las bajas temperaturas de la noche y la madrugada, para poder abastecer de nieve artificial a la Magic Carpet 3. Este sector en la base de la montaña, es utilizado por los principiantes que están aprendiendo a esquiar o hacer snowboard.

En las pistas más alta, los esquiadores profesionales esperan más nieve natural, en especial esta semana cuando el cerro esté repleto de turistas argentinos y brasileños.

El presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Bariloche, Martín Lago, estimó en un 80% la ocupación en julio y 70%, en agosto.

En Bariloche la ocupación hotelera está en torno al 80% en julio. Foto Euge NemeEn Bariloche la ocupación hotelera está en torno al 80% en julio. Foto Euge Neme

En cuanto a las expectativas para las próximas semanas, el empresario dijo que espera que llegue el segmento de turismo nacional que define a último momento su viaje y poder contar con más nieve para recuperar el segmento de esquiadores que no vinieron durante julio.

Impacto de la sequía

Las estadísticas del Instituto Argentino de Nieve, Agua y Atmósfera (IANIGLA) muestran que la cobertura de nieve en Mendoza se encuentra un 30% por debajo del promedio histórico.

La falta de humedad, combinado con temperaturas más elevadas que la media de la época, ha contribuido a un derretimiento acelerado de la nieve acumulada.

Las proyecciones climáticas sugieren que la actual fase neutra de El Niño dificulta la predicción de precipitaciones, lo cual podría agravar la crisis hídrica en la región.

El Departamento General de Irrigación de Mendoza alertó por la reducción del caudal de los ríos durante las próximas décadas.

Para 2050, las cuencas sureñas de la provincia podrían experimentar una disminución de entre el 20% y el 30% de su caudal. «Esta merma en el volumen de agua se verá exacerbada por una creciente demanda, lo que plantea un desafío hídrico considerable para la región», sostiene Irrigación.

En el Río Atuel se proyecta con un 20% menos de volumen para 2050, lo que podría generar un déficit hídrico de hasta el 34%. La situación es aún más crítica para el Río Diamante, que en los próximos 25 años podría ver una reducción del 30% en su volumen.

El Río Mendoza no escapa a esta tendencia, con una caída estimada del 18% en su volumen y un déficit hídrico del 32%.

A futuro, el organismo regulador del agua en Mendoza sostiene que costará mantener la superficie actual cultivada y más aún, crecer en nuevas plantaciones.