¿Por qué a partir de los 30 aparecen pequeños lunares rojos en la piel? Mitos y verdades sobre los puntos rubí | Belleza | S Moda

¿Por qué a partir de los 30 aparecen pequeños lunares rojos en la piel? Mitos y verdades sobre los puntos rubí | Belleza | S Moda


A los 30, la piel necesita nuevos cuidados. Muchos dermatólogos coinciden en que esta edad es algo parecido a un punto de inflexión: empieza a caer la producción de colágeno y elastina (esas proteínas que mantienen la piel tersa y elástica), la regeneración celular es más lenta (lo que antes tardaba 28 días en renovarse, ahora puede llevar 35) y comienzan a aparecer las primeras manchas y pigmentaciones. Es ahora cuando el exceso de sol a los 20 comienza a pasar factura. Y, de pronto, un día aparece un pequeño lunar rojo.

Su nombre médico es “angioma de cereza”, como si fueran una salpicadura de esta fruta veraniega. También se les conoce como “puntos rubí”, convirtiendo en joya su intenso color, o, menos poéticamente, “angiomas seniles”, y, muy probablemente, a esa peca de color rojo intenso le seguirán unas tantas con el tiempo.

¿Qué son y por qué salen los puntos rubí?

“Son pequeñas proliferaciones benignas de vasos sanguíneos en la piel. Suelen ser de color rojo brillante, redondeados y de pocos milímetros de diámetro. Aparecen de forma espontánea sin un desencadenante claro y son muy comunes, sobre todo a partir de cierta edad”, tranquiliza la doctora Ana Suárez, especialista en Dermatología Médico-Quirúrgica y Venereología del Instituto Médico Ricart (IMR). Si bien se asocian al envejecimiento de la piel (de ahí el adjetivo “senil”), también tienen un componente genético importante. Si te has descubierto uno, probablemente tus padres tengan unos cuantos. “No hay un número límite, pueden seguir apareciendo con los años. En personas con predisposición genética pueden llegar a tener decenas o incluso cientos, sin que esto suponga un problema de salud”.

“Los puntos rubí son muy característicos: redondos, de un color rojo o violáceo intenso, lisos y no suelen dar síntomas. A diferencia de otros tipos de manchas o lesiones, no suelen cambiar de forma”, añade esta dermatóloga. Aun así, si una lesión cambia o genera dudas, debemos de consultar al médico.

¿Son peligrosos o pueden convertirse en algo maligno?

“No, son completamente benignos. No tienen potencial maligno ni se transforman en cáncer. Lo importante es diferenciar bien este tipo de lesión de otras que sí podrían ser preocupantes y que pueden confundirse. Por ello ante la duda, es mejor siempre consultar al dermatólogo”, recomienda Ana Suárez.

Sí es conveniente estar atento a posibles cambios. “Si un punto rubí sangra sin motivo, cambia de tamaño o forma, se ulcera o duele, conviene revisarlo, aunque lo más frecuente es que se trate de un traumatismo no percibido. Aunque es raro que un angioma se comporte así, siempre es prudente descartar otras causas”, añade esta doctora.

¿Es verdad que salen más a las mujeres?

“Afectan por igual a ambos sexos, aunque algunas series clínicas reportan una ligera mayor prevalencia en mujeres”, precisa Ana Suárez. “El aumento de estrógenos puede estimular el crecimiento de los vasos sanguíneos y por tanto la aparición de nuevos angiomas durante el embarazo”.

Los puntos rubí son mucho más frecuentes de lo que podríamos pensar: más del 75% de las personas mayores de 70 años tienen alguno, según datos de esta experta.

¿Se pueden eliminar por motivos estéticos?

Sí. Si bien no requieren tratamiento médico, muchas personas eligen eliminarlos por razones estéticas, especialmente si están en zonas visibles. “El tratamiento más habitual es el láser vascular, en concreto el más usado es el Neodimio YAG, que los elimina de forma precisa y suele dejar la piel prácticamente sin marcas. También se puede recurrir a la electrocoagulación especialmente en los de mayor tamaño, aunque generalmente con mayor riesgo de lesión residual”, explica Ana Suárez. Estos procedimientos son

rápidos y mínimamente molestos, a menudo se realizan con anestesia tópica y no requieren recuperación larga. Eso sí, aunque los eliminados no reaparecen, sí que hay que tener en cuenta que pueden aparecer nuevos con el tiempo.