Decenas de taxistas realizaron este domingo por la mañana una caravana hasta el domicilio de San José 1111, donde cumple prisión domiciliaria la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, para expresarle su apoyo a CFK ante la persecución judicial y pedir por su libertad. Se trata de un nuevo frente llamado Fuerza Taxi, que nuclea a organizaciones y cooperativas de taxistas que realizan acciones contra la proscripción y el encarcelamiento de la expresidenta y para enfrentar el ajuste del gobierno de Javier Milei. “La de hoy fue una acción que llevamos adelante como trabajadores de nuestra actividad, y remarco la palabra trabajadores, porque tenemos conciencia de clase”, dijo a Página/12 uno de los referentes de Fuerza Taxi, Pablo Villarruel.
“Casi inmediatamente después de que llegamos, ella salió al balcón y estuvimos dialogando unos minutos», contó Villarruel. «También le hicimos llegar unos regalos. Uno fue el libro Economía de Plataformas, gracias a la editorial Caja Negra, que pese a que está agotado hicieron lo imposible para conseguirlo, y también le regalamos un suéter y una carta. Ella nos agradeció, dijo que le pareció muy interesante el libro, y que lo que más le gustó fue la carta”, añadió. Frente al balcón de la esquina de San José y Humberto Primo se desplegó una bandera celeste y blanca con la inscripción «Cooperativa Argentina 7 de Mayo» y la silueta de un taxi negro y amarillo. A su lado se ubicó una bandera de caña color naranja, de la agrupación Identidad Taxista.
La persecución judicial contra la expresidenta Cristina Fernández Kirchner motivó la conformación de Fuerza Taxi, que está compuesto por cinco organizaciones y nuclea a unos 250 trabajadores y trabajadoras del sector. “Hay desde una cooperativa de trabajo hasta una parada de taxi, pasando por una agrupación, una organización de taxis y taxistas silvestres o que no se sienten representados por nadie y que nuestro frente los representa”, explicó Villarruel y destacó la actividad que llevaron a cabo este domingo. “La jornada de hoy transcurrió en paz y con alegría. Fue una acción que llevamos adelante como trabajadores de nuestra actividad, y remarco la palabra trabajadores, porque tenemos conciencia de clase, es decir, no somos solamente taxistas sino trabajadores taxistas”, sostuvo Villarruel y apuntó contra “el terrible fallo contra CFK, arbitrario, digitado desde el imperio y ejecutado por la Corte Suprema de Justicia”. “Exigimos su libertad porque es inocente”, afirmó.
El referente de Fuerza Taxi mencionó su reivindicación de los años de gobierno de CFK, en los cuales “el taxi porteño vivió su mejor momento en la actividad en toda su historia”. “Como dato, teníamos la posibilidad de renovar nuestras unidades, es decir nuestros vehículos que son herramientas de trabajo, en promedio cada dos años y medio, dejábamos el que teníamos y pasábamos a un 0 kilómetros. Hoy tenemos que estar rogándole a la Legislatura porteña que nos den prórroga tras prórroga porque los autos están cada vez más viejos, no podemos comprar autos nuevos y no hay línea de crédito accesible. Son datos concretos, no opiniones”, aseguró y añadió que en esa época “salíamos a trabajar siete u ocho horas y nos alcanzaba para vivir”. “Casi que se cumplía el viejo axioma de las ocho horas de trabajo, ocho horas de descanso y ocho horas de vida social u ocio. Teníamos capacidad de ahorro, podíamos irnos de vacaciones y proyectar un futuro, lo cual hoy es imposible”. lamentó.
“Fuerza Taxi nace como un frente nuevo, que busca ser distinto, no solamente para dar pelea e intentar reflotar nuestra actividad centenaria que es la del taxi, sino también para unirnos a todas las luchas que se presentan de forma colectiva y solidaria, con los jubilados, los trabajadores del Garrahan, los docentes y más”, resaltó Villarruel y consideró que “si nos aislamos sectorialmente de la problemática que cada rubro tiene, todo se dispersa y nada se soluciona, esa es la visión que tenemos”. La caravana hasta el departamento del barrio porteño de Constitución, en el que CFK se encuentra detenida, no fue la primera acción que realizaron como espacio político. “Participamos de la última movilización multisectorial que se hizo por el Garrahan, y también hemos ido casi todos los miércoles a las marchas de los jubilados. Yo mismo he recibido más de 20 balazos. El día que lo balean al cronista de C5N Nicolás Munafó, primero balean a una persona con campera blanca con escudo de Huracán, ese era yo”, agregó.
El referente de Fuerza Taxi hizo hincapié en la necesidad de organizarse y enfrentar en las calles el modelo de ajuste y vaciamiento de La Libertad Avanza, cuyas consecuencias «cada vez van a ser peores». «La casta al final éramos nosotros y no la gente de dinero. No era Galperín, ni Rocca, ni Eurnekian, ni Magnetto, sino que éramos los comunes y corrientes«, consideró y mencionó las consecuencias sociales del ajuste del Gobierno sobre los medicamentos oncológicos, los alimentos para los comedores populares, el techo en las paritarias y la toma de deuda indiscriminada, entre otros aspectos. «También nos preocupa mucho es el nivel de violencia verbal, que suele anteceder a la violencia física. Milei no para de violentar verbalmente cada vez que habla a la gente que no piensa como él», planteó el referente de Fuerza Taxi.
Informe: Juan Pablo Pucciarelli