La mirada históricamente porteñocentrista de este país, y por ende del periodismo, deja pasar por el costado sucesos que son únicos e irrepetibles. Si se habla del deporte, el descuido se potencia cuando tiene que ver con una actividad que no es el fútbol, o con el fenómeno de moda, hoy la Fórmula 1 con Franco Colapinto. Pero es gigante el territorio y muchísimas las pasiones, y el mejor ejemplo se dio estos días en el básquet de Bahía Blanca, con una final de película a cinco partidos que tuvo de todo, hasta una piña digna de boxeo. Se vio por streaming, a través de YouTube.
La tierra de Emanuel Ginóbili, bautizada desde mucho antes de la aparición de Manu como la capital del básquet argentino, vibró como pocas veces con la definición del torneo de la Asociación local entre Olimpo y Napostá: el primero, un club conocido a nivel nacional, famoso por sus colores aurinegros; el segundo más propio de esa zona del sudeste bonaerense, que lleva el nombre de un arroyo y cuenta con una historia que se remonta a 1928, el año de su fundación.
Sin equipos en la Liga Nacional de Basquet desde el año 2021, tras la última participación de Bahía Basket (hoy en la segunda de la ABB), la competición hogareña se convirtió en el centro de atención por excelencia del público bahiense, por encima de lo que muestra la TV desde Europa o con las estrellas de la NBA, y hasta de lo que devuelve la Selección Argentina, atravesando su etapa más pobre desde la explosión de la Generación Dorada. Pero el basquet demuestra que sigue vivo en Bahía.
Olimpo y Napostá llegaron a la final de la primera etapa del torneo de la ABB y los cinco juegos se disputaron en el emblemático estadio Osvaldo Casanova, la casa de Estudiantes, que se llenó con más de 3.000 personas en cada una de las presentaciones. La secuencia de resultados fue para uno y el otro, hasta llegar al duelo del lunes 11, el más espectacular y parejo de todos, que tras el 77 iguales del tiempo reglamentario precisó de un suplementario en el que el aurinegro fue más efectivo y se impuso por 92-88 para gritar campeón.
— José Flores (@JoseAurinegro2) August 8, 2025
La fiesta fue total tras el sonido de la chicharra, con los hinchas de Olimpo invadiendo el parquet del Casanova y levantando en andas a los jugadores, para colgarse de los tableros y entonar las canciones más emblemáticas de la institución. La formación dirigida por Juan Cruz Santini tuvo la actuación estelar de Fausto Ruesga, MVP de la final. El alero de 1,98 metros de altura y 25 años de edad, que irrumpió en Bahía Basket, pasó por el ascenso de España y ya jugó en la Selección Argentina, regresó en junio al básquet de la ciudad para consagrarse con el club de su vida: su padre, César Ruesga, es un reconocido coach y fue dirigente de Olimpo.
Las imágenes en la trasnoche bahiense de celebración se extendieron hasta las calles de la ciudad, una postal reconfortante y diametralmente opuesta a la que se vivió en estas mismas arterias entre el 7 y el 9 de marzo pasados, cuando una feroz inundación provocó la muerte de 18 personas y destrozos que todavía no pudieron recuperarse.
El más campeón de la Capital Nacional del Básquet.
pic.twitter.com/5LEje6OVrA— dios del Olimpo (@diosdelolimpo74) August 12, 2025
Por esto y mucho más, Bahía se merecía una alegría de estas, a pesar de que la gloria haya quedado solamente para los de amarillo y negro. Al trofeo se le llamó «Bebe» Storti, en homenaje a uno de los pioneros del básquet bahiense, fallecido a los 93 años de edad, en medio del partido 2 de la serie.

Napostá tendrá revancha en la segunda etapa del torneo, en busca de un título que le abriría la chance de volver a enfrentar a Olimpo para decidir quién será el campeón 2025 del básquet bahiense, donde compiten equipos como Pacífico, Bahiense del Norte, semifinalistas en este primer trampo, y el propio Olimpo, que en caso de repetir se adjudicará el certamen global sin necesidad de otro cara a cara.

Una final inolvidable que quedó manchada por una piña
La definción del básquet tuvo pasión pero también violencia, o para ser justos un pequño incidente que no pasó a mayores. En el partido 4, en medio de ese clima caliente que se vivía alrededor de la cancha, un tumulto en la platea de Olimpo se terminó con un piñazo y el «uuuuuh» de toda la cancha. Un rato antes, según estableció un informe del tribunal de discplina, la persona que arrojó el golpe de puño había lanzado una botella de agua mineral que pasó cerca del árbitro y de un jugador de Napostá, situación por la cual algunos dirigentes de Olimpo le estaban exigiendo que se calmara, entre ellos el que terminó recibiendo el golpe de nocaut.
La persona responsable del golpe de puño al protesorero de Olimpo es hermano de un jugador del mismo club y fue rápidamente detenida por la policía: se le aplicó una sanción de 4 años de suspensión, imposibilitado de acercarse a ver partidos de la ABB.
Piñazo
El incidente en la platea de Olimpo que detuvo la final en el Casanova https://t.co/WWeF0WDrNz pic.twitter.com/fbpskoYo3O
— Maximiliano Allica (@maxiallica) August 8, 2025
En el documento presentado por la Asociación de Básquet Bahiense se recopila que «restando 2 minutos y 12 segundos para la finalización del tercer período y encontrándose detenido el juego por la lesión de un jugador del Club Olimpo, fue arrojada a la cancha una botella desde la parcialidad local, sin impactar en ningún participante del juego. Posteriormente, desde la platea local, un simpatizante del Club Olimpo —identificado como el Sr. Iván González Galarza— arrojó otra botella de agua llena, que pasó a escasos metros del árbitro principal y de un jugador visitante».
Unos instantes después llegó la agresión, cuando «un dirigente del club local se acercó a reprochar el accionar del simpatizante, quien lo agredió con un golpe de puño en el rostro. El dirigente cayó de las plateas, generando un tumulto, y el agresor fue retirado por personal policial presente en el estadio».
Olimpo también repudió el episodio y abrió un proceso disciplinario contra Gómez Galarza, aplicándole «derecho de admisión hasta que se resuelva su expulsión o no como socio de la entidad», según reza el comunicado.
La situación descrita motivó que los jueces se retiraran a la zona de vestuarios. Una vez allí, se realizó una reunión con dirigentes de ambas instituciones, representantes de Aprevide y de la ABB, con el fin de garantizar la continuidad del juego en condiciones de normalidad hasta su finalización. El partido 4 se reanudó sin complicaciones y la serie terminó quedando 2-2, propiciando la final que se llevó a cabo el lunes sin inconvenientes.
Olimpo y aquellos años felices dedicados al fútbol
Olimpo, un club de básquet que se hizo conocido por el fútbol. Ya pasaron siete años del adiós del aurinegro al fútbol de Primera, donde jugó 14 temporadas desde su primera vez, en 1984, y un largo tiempo después varios ascensos y descensos, desde el año 2003 hasta su despedida, a mediados de 2018. Se extraña el color del Roberto Carminatti, donde fueron campeones Boca y River, se gritaban los goles del Flaco Delorte y se hicieron míticas las patadas de Mauro Laspada.
El tobogán lo hizo pasar de la A al Torneo Federal, donde siempre fue protagonista pero nunca logró regresar, debiendo conformarse con alegrías (y tristezas) ante su clásico rival, Villa Mitre.