Maurcio Macri castigó como pocas veces antes a los dirigentes que abandonaron su partido para irse a La Libertad Avanza. “Los que tenían precio ya fueron comprados, los que quedamos tenemos valores”, les roció veneno. Lo dijo tras un encuentro en Mar del Plata con su intendente, Guillermo Montenegro, que sonaba entre los que podían irse del PRO (no obstante, por más que se anunció una y otra vez no ha ocurrido hasta ahora). La respuesta no se hizo esperar y vino de parte del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, el primero en irse del PRO: “Si algo no tengo es precio”, retrucó. Macri volvió a poner como condición para un acuerdo bonaerense entre LLA-PRO que sea entre partidos y no sumando unos pocos dirigentes. Del otro lado, siguen diciendo que no consideran que el PRO se merezca un frente partidario porque ya está en las últimas.
La discusión por un frente electoral en territorio bonaerense sigue sumando picante. Macri fue a reunirse con Montenegro y otros dirigentes de la Quinta Sección Electoral para discutir un acuerdo con LLA. Al igual que en otro encuentro que tuvo la cúpula del PRO bonaerense el día anterior, la mayoría se mostraron a favor de la alianza. No obstante, Macri puso condiciones: “Lo que tenemos por delante es un acuerdo institucional“, remarcó. “Nosotros vamos a poner todo lo mejor que tenemos desde el PRO y ellos tienen que poner lo mejor que tienen dentro de La Libertad Avanza. Me da la sensación de que todos los que tenían precio, ya los compraron”, lanzó sobre los que se fueron del PRO, de Patricia Bullrich en adelante.
“Lo que hay acá no es gente con precio, es gente con valores. Lo otro es un camino que nosotros no recomendamos, pero de golpe alguno de ellos cree que puede tener algún tipo de éxito. Yo no creo que sea el núcleo más importante de dirigentes valiosos que tiene este espacio”, los fustigó Macri.
La respuesta no se hizo esperar y llegó de la mano de Valenzuela, un intendente que formaba parte de la conducción del PRO bonaerense que Macri logró desplazar cuando asumió la presidencia del partido (y que ahora tiene a la cabeza a Cristian Ritondo) y un dirigente que está referenciado desde el comienzo con Bullrich. Este año, anunció que dejaba oficialmente el PRO y se iba a LLA. “Si algo no tengo es precio. Nuestros valores con Patricia Bullrich son claros: apoyar el cambio que votaron los argentinos y no caer en especulaciones partidarias”, le retrucó Valenzuela.
Negociación espinosa
Detrás de las palabras duras de Macri hacia quienes lo abandonaron para irse con Milei está una negociación que viene complicada: desde LLA ya promocionaron dos fotos de Karina Milei en la Rosada con Ritondo y Diego Santilli, pero siguen diciendo sotto vocce que no habrá un acuerdo partidario con el PRO, sino que les quitarán dirigentes.
Esto, obviamente, a Macri no le piacce. Y, en el encuentro con Montenegro, lo expresó: “El Presidente trabaja con su entorno y a ese entorno le delegó la posibilidad de negociar acuerdos y sumar fuerzas. Con ese entorno es que habla semanalmente Cristian (Ritondo). Veremos cuál es el resultado. Lo importante para todos los bonaerenses es que nosotros tenemos una vocación absoluta de sumar para terminar con las ideas populistas que tanto daño han hecho. En nuestro caso, cuenten con que vamos a hacer lo imposible para darles una propuesta que les genere más entusiasmo. Si hay vocación y generosidad de las partes, el tiempo existe”, remarcó.
Dicho más sintético: si no hay acuerdo, no será culpa del PRO, sino de Karina Milei.
“Lo importante es que pongamos un proyecto de país por arriba de todos los intereses particulares, esa es la gran diferencia ¿Discutimos un proyecto de país o un proyecto de poder? Si discutís un proyecto de poder no hay tiempo que te alcance y no vas a llegar a un acuerdo”, remarcó Macri, que viene diciendo que el entorno de Milei abandonó el proyecto de país que compartían y ahora solo tienen un proyecto de poder. El expresidente le apuntó a los flancos al Gobierno cuando dijo que hay que “tirar todos juntos del carro del progreso que hace falta para que no sigamos teniendo jubilados cobrando la mínima ni empleados que están bajo la línea de la pobreza”.
Y, en plan de pegar donde duele, recordó que el último dato de inflación fue un 3,7 por ciento: “El tres y pico de inflación lo queremos anual y el PRO puede aportar equilibrio, profesionalismo y seguirá aportando donde la gente confíe en que gobernemos, como en Mar del Plata o Pinamar”, remarcó Macri, quien consideró que en el acuerdo también tiene que estar “un sector del radicalismo”.
Un día antes, Ritondo encabezó un encuentro con dirigentes de la cúpula del PRO bonaerense donde el macrismo trajo ese planteo: que a la discusión hay que sumar a la UCR que conduce Maximiliano Abad. Ritondo, de hecho, tenía varias conversaciones avanzadas con Abad hasta que empezó la chance de sumar a LLA. Ahí Abad suspendió un encuentro de intendentes del PRO y la UCR y las negociaciones fueron al freezer. En ese encuentro, Ritondo propuso hacer un encuentro con todos los concejales del partido. La idea es mostrar el poder territorial que tiene el PRO frente a lo que tiene LLA.
Seamos diferentes
A la negociación bonaerense le sigue sumando ruido la discusión de la campaña porteña. Para el caso, Silvia Lospennato sumó diferencias con La Libertad Avanza que, en la práctica, terminan siendo buenas razones para no acordar: “No somos lo mismo. Nosotros estamos comprometidos con la institucionalidad, el respeto por la libertad de expresión, no intoxicamos de noticias falsas en las redes sociales. No queremos políticas que se centren solo en la confrontación, nuestros modos son distintos”, enumeró.
Lospennato volvió a cuestionar a Karina Milei por su proyecto de reemplazar al PRO: “Destruir al PRO, ¿es una buena idea para el futuro de los argentinos? Un espacio liberal, republicano, responsable. ¿No deberíamos trabajar para que el kirchnerismo no vuelva? Ahora, cada vez que el presidente nos necesite para combatir al kirchnerismo vamos a estar ahí, me hubiera encantado que en la Ciudad pase lo mismo”.
No deja de ser una pregunta para quienes negocian en la provincia de Buenos Aires: ¿cómo se hace para acordar con alguien que, entre sus planes, tiene la extinción del PRO? Por ahora, no hay respuesta.